¿Has notado que tu persiana pierde un poco de estabilidad o se ha desviado de su alineación? Es posible que necesites ajustar los tirantes, dos cordones que sostienen la posición de las persianas. ¡No te preocupes! Cambiar los tirantes de una persiana es una tarea relativamente sencilla que podés realizar tú mismo en casa sin necesidad de ser un experto.
Con este artículo, aprenderás a identificar si necesitas cambiar los tirantes, a elegir el material adecuado y a seguir paso a paso con una guía detallada para la reparación. Al final de esta lectura, no solo te sentirá más seguro para resolver este pequeño problema en tu hogar, sino que también entenderás mejor cómo funciona tu persiana.
Tipos de tirantes para persianas
Los tirantes pueden estar fabricados con diferentes materiales, cada uno con sus propias ventajas y desventajas:
Tirantes de cordón o cable: Estos son los más comunes y económicos. Se componen de un hilo o cable resistente a la fricción que se ajusta mediante una serie de rodamientos para lograr la tensión correcta. Ofrecen suficiente resistencia para un funcionamiento adecuado, pero pueden deteriorarse con el tiempo y romperse si se sobrepasan sus límites.
Tirantes metálicos: Están fabricados en acero inoxidable o aluminio y brindan mayor resistencia que los cordones tradicionales. Son ideales para persianas de uso intensivo o en ambientes húmedos donde la corrosión es un factor importante. Su precio suele ser ligeramente superior al de los cordones, pero su durabilidad a largo plazo compensa la inversión.
Tirantes de plástico: Aunque menos comunes, existen tirantes fabricados con plástico resistente. Ofrecen una buena relación calidad-precio, son fáciles de instalar y suelen venir en una variedad de colores. Sin embargo, pueden ser menos duraderos que los cordones metálicos o de acero inoxidable.
Herramientas necesarias para cambiar los tirantes
Para realizar la reparación, necesitarás algunas herramientas sencillas:
Pelacables: Para retirar el recubrimiento del cable de los tirantes viejos, si es necesario.
Alicates: Para ajustar la tensión de los tirantes y asegurar su fijación.
Cuchillo o Tijeras: Para cortar los nuevos tirantes a la longitud adecuada
Lápiz o marcador: Para marcar la ubicación y el tamaño del nuevo tirante
Pautas para cambiar los tirantes
Observa la posición de los viejos tirantes: Antes de comenzar, preste atención al recorrido que hacen los tirantes actuales y cómo se fijan en las partes superior e inferior del cajón de la persiana.
Desmonta los viejos tirantes: Desatornilla o desengancha los extremos de los tirantes viejos del cajón y asegurate de retirar bien cualquier pieza pequeña, como tuercas o arandelas, que pueda servirte para instalar el nuevo tirante.
Medí el tamaño de los nuevos tirantes: Con una cinta métrica, mide con precisión la longitud del antiguo tirante (de extremo a extremo)
Cortá y ajusta los nuevos tirantes: Recortá suavemente los nuevos tirantes a la medida requerida. Puede ser necesario añadir un pequeño sobrante para permitir un ajuste mejor a lo largo de los rodamientos.
Instalá los nuevos tirantes: Inserta los nuevos tirantes en los puntos donde estaban anclados los existentes, asegurándote de que se guían correctamente por el mecanismo de elevación de la persiana.
Ajusta la tensión: Utilizá alicates para tensar los nuevos tirantes y lograr una posición recta y firme en la persiana.
- Prueba la persiana: Sube y baja la persiana varias veces para verificar si se mueve con fluidez y si mantiene su posición correctamente.
Nuestro consejo
¡Felicidades! Ahora sabés cambiar los tirantes de la persiana. Con un poco de paciencia y las herramientas adecuadas, podés reparar esta molestia común por tu cuenta. Si después del procedimiento la persiana no funciona correctamente o se presentan problemas adicionales, es recomendable consultar con un profesional especializado en persianas para una asistencia más especializada.